Un millar de indígenas de Ecuador marcharon este martes de forma pacífica en Quito para rechazar la adjudicación de áreas mineras y petroleras en sus territorios sin ser consultados previamente como manda la legislación local.
«Los territorios de los pueblos indígenas en los últimos 50 años (se) han convertido en territorios sacrificables», dijo a la prensa Leonidas Iza, presidente de la mayor organización de pueblos originarios Conaie.
Y reclamó: «De los pueblos indígenas sacamos minería, sacamos petróleo. Dejan muerte, dejan contaminación del agua, contaminada la selva, contaminados los territorios de los que están comiendo, y prácticamente el desarrollo a estos territorios no ha llegado».
Iza encabezó la marcha hasta la sede de la Asamblea Nacional para entregar un proyecto de ley que regule la consulta previa y ambiental, que debe realizarse antes de la adjudicación de zonas para la extracción de recursos naturales.
Con carteles de protesta
Este mecanismo está consagrado en la Constitución, pero no existe un reglamento para su aplicación.
«Lo que vamos a presentar es una ley orgánica que el Estado, en todas sus dimensiones, respete a los titulares de derechos que son las comunas, comunidades, pueblos y nacionalidades», expresó Iza.
Con carteles con leyendas como «No a la minería, sí a la vida» y «el agua es nuestro mejor tesoro», en la marcha participaron pobladores de zonas mineras.
Margot Villamarín, una campesina de la localidad Las Pampas, en la céntrica provincia de Cotopaxi, denunció que la socialización de los proyectos extractivos no se hacen con toda la comunidad.
Opositores al extractivismo
Los opositores al extractivismo «hemos sido amedrentados con la fuerza policial y militar en nuestro sector (…) Nos han tratado como terroristas y no somos eso, somos campesinos que defendemos nuestra agua, nuestra naturaleza», expresó a la AFP la mujer de 50 años.
El martes en el norte y sur de la capital, pequeños grupos de militantes de izquierda y educadores también quemaron neumáticos en rechazo al alza del precio de la gasolina en vigencia desde el pasado viernes.
Estas protestas ocurren antes de la marcha convocada para este jueves por el Frente Unitario de Trabajadores (FUT), que agrupa a las principales centrales sindicales. La Conaie se ha mantenido al margen.
El precio del galón americano de gasolina corriente (82 octanos) subió un 11%, pasando de 2,46 a 2,72 dólares. Ese valor se ajustará mensualmente de acuerdo al precio internacional del petróleo, subiendo a un máximo de 5% y bajando hasta en 10%.